"Todo lo que pase es necesario que pase, aunque a veces nos sorprenda porque ignoremos las múltiples e irresistibles causas que han coincidido para producirlo"
F. SAVATER, la hermandad de la buena suerte
La vida tiene sentido? Tiene un
por qué? Tiene un para qué?
La vida es vida, y sin importar
que tan buenas o malas sean tus acciones las cosas pasan, lo bueno, lo malo, lo
feo y lo maravilloso llega a nuestras vidas, todo llega y todo se va, porque sencillamente
nada se queda.
Somos víctimas
del azar, de la casualidad, de la combinación efectiva de elementos, estamos
hechos al azar? o somos el fruto de algo más allá de nuestro entendimiento.
De lo que sí tenemos certeza es, que no tenemos en nuestro haber nada
importante ni fascinante por hacer no somos excepcionalmente especiales en el
universo ni estamos para gobernarlo, ni mucho menos está a nuestros pies, solo
somos una minúscula parte que se conecta con el todo, no somos los reyes, no
mandamos las fuerzas de la naturaleza no obedecen a nuestros designios solo somos una muy pequeña parte de este todo
que solemos llamar universo.
Sabido esto tenemos dos caminos
una dejarnos llevar por esta vida sin sentido con la firme certeza de que todo algun
dia va terminar y decides esperar inmóvil, inerte a que al fin el dia en que la
vida así como la conoces se transforme en otra cosa para nada especial pero
igualmente perteneciente al todo.
O seguir otro camino que consiste
en vivir sin creerte especial no solo
porque no lo eres sino porque sabiéndote parte del todo comienzas a apreciar
las demás partes de este universo lo natural, lo vivo todo complementa tu existir porque todo está
conectado con el todo.
Cuando comprendemos que todo nos
complementamos con el todo y al mismo tiempo pertenecemos a este todo, sabemos que el universo no está para nuestro servicio, que así como nos da es deber devolver con amor algo de lo que sacamos provecho.
Lo maravilloso que encierra el no
sentirse especial amo y señor del universo es que tu vida no es independiente; que dependes del todo para seguir vivo,
vives maravillado de la belleza que te rodea, empiezas a amarte tal cual eres y
a manifestar ese amor propio amando al otro que en apariencia es semejante a
ti, amar a todo lo que no se parece a ti pero depende de ti y tu dependes de
ese todo. Sigues reconociendo tus limitaciones y a valorar los aciertos de
otros que complementan esa limitaciones y es así como comienza el camino del
amar sin medida sin temor sin porqués sin paraqués.