miércoles, 27 de marzo de 2019

EL HILO INVISIBLE DE LAS PALABRAS MAL DECIDAS



Por ahí dicen, “hecha la norma hecha la trampa” pero resulta que más que un refrán es un eufemismo la llamada trampa no es más que un escape ante la represión de leyes o normas arbitrarias y sin sentido que la cultura antinatural impone y la sociedad acepta a ciegas . Ninguna ley o norma que inicie con las palabras “se prohíbe” es conveniente para la salud mental de las personas. Y aunque no lo sabemos de primerazo a la larga  nos damos cuenta del daño que estas leyes nos hacen. Aunque no estoy diciendo que hay que ir en contra de la norma. Si me refiero a que debemos ser conscientes de nuestra realidad y actuar en pro de mejorarla.
Nadie a estas alturas del partido puede negar que estamos a portas de una neurosis colectiva que precisa con urgencia un cambio en nuestro lenguaje por palabras con menor contenido violento. Piensa cuantas palabras violentas dices en una conversación normal con otra persona y date cuenta que nuestra forma de hablar genera más violencia , se precisa de un cambio en nuestra forma de comunicarnos no solo en la oralidad sino también en lo corporal, que nuestras actitudes sean actitudes de paz, ahora bien, piensa cuales de tus actitudes al momento de comunicarte con otra persona son violentas, piensa en tu corporalidad, imagínate fuera de tu cuerpo mientras hablas y mírate a ti mismo visualiza tus actitudes, tus gestos mientras escuchas, la posición de tus manos de tus pies si le miras a los ojos o evades esa mirada esa comunicación sin palabras.
Sé que lo que ahora estás leyendo no son frases nuevas y que en algún lado las habrás leído escuchado o se te han ocurrido pero lo importante ahora es que es tiempo de poner en práctica este cambio. Aunque los pesimistas se apoderen del mundo aún queda gente que se levanta por las mañanas a luchar (y me disculpan por la palabra violenta que aún estoy en proceso de formación), a trabajar honradamente para salir y sacar a sus familias adelante, aunque los pesimistas digan que este mundo ya no tiene arreglo o que estamos condenados al fracaso creo que aún hay esperanza. Mientras haya personas que no les da miedo amar a los otros, compartir, ser solidarios y no competitivos, dar  abrazos, desear un feliz día desde las entrañas, personas que estén dispuestas a  devolver al mundo lo que éste maravillosamente nos da, mientras estas personas estén por ahí en claro que vale la pena intentarlo,  intentarlo diariamente.

lunes, 18 de marzo de 2019

AYÚDATE PRIMERO



Quieres ayudar?
Ayúdate primero
Sólo los amados aman.
Sólo los libres liberan.
Sólo son fuentes de paz quienes están en paz consigo mismo.
Los que sufren, hacen sufrir.
Los fracasados necesitan ver fracasar a otros.
Los resentidos siembran violencia.
Los que tienen conflictos provocan conflictos a su alrededor.
Los que no se aceptan no pueden aceptar a los demás.
Es tiempo perdido y utopía pura pretender dar a tus semejantes
lo que tú no tienes.
Debes empezar por ti mismo.
Motivarás a realizarse a tus allegados en la medida en que 
tú estés realizado.
Amarás realmente al prójimo  en la medida en que aceptes
y ames serenamente tu persona y tu pasado.
"Amarás al prójimo como a ti mismo", pero no perderás de vista 
que la medida eres "tú mismo".
Para ser útil a otros, el importante eres tú mismo.
Sé feliz tú y tus hermanos se llenarán de alegría.

IGNACIO LARRAÑAGA

domingo, 10 de marzo de 2019

ES HORA DE SANAR


“conócete a ti mismo” Apología de Sócrates Platón  


La humanidad está enferma afectivamente. La peste emocional está en todas partes de nuestra sociedad. Yo quiero ver el cielo en la tierra y la mayor parte de la gente quiere lo mismo, pero no  se tiene la voluntad para conseguirlo.
Nuestra enfermedad emocional se evidencia en la incapacidad de estar solos: buscamos personas  y las llamamos amigos o pareja con el único fin de tener su aprobación, cambiamos nuestras actitudes para que nos amen y nos acepten, pero de verdad nos aceptan como realmente somos?
Compramos cosas que no necesitamos, ropa, zapatos costosisimos, automóviles, artefactos tecnológicos y demás  para llenar nuestros vacíos emocionales. Humanizamos animales de manera descarada obligándolos a que se comporten de acuerdo a nuestro amaño negandoles su naturaleza bajo la falacia del amor sincero, nunca un lengüetazo o una movida de colita va reemplazar un abrazo de una persona. Recurrimos a la religión con la esperanza de una salvación y el perdón de nuestros pecados, sumergiéndonos cada vez más en un estado de culpa y represión , pedimos y agradecemos favores a Dios como si fuera nuestro mayordomo, como si trabajara para nosotros.
Una persona sana emocionalmente es consciente que no necesita de nada para estar bien consigo misma.
Las desgracias, el desamor, las enfermedades del cuerpo, la muerte  e incluso la depresión nos pasan a todos, estos sucesos no tienen nada que ver con las posesiones, la fama, el número de palabras sagradas que hayas pronunciado o leído, la alabanza, el culto e incluso las acciones buenas o malas que hayas hecho. Las cosas pasan y nos pasan a todos. No por eso tenemos que dejar de ver el maravilloso milagro del universo que es tu vida. Un ser único e irrepetible, una única combinación genética  16 mil años de evolución para que el universo diera como fruto a ese ser tan maravilloso que no necesita de adornos consumistas ni dependencia de ningún grupo de familiares, amigos o compañeros sentimental para ser quien eres.
Amate tal cual eres, conócete e identifícate como ser único en todo el universo ten claro que no solo estas en el universo también eres parte de él y que el universo mismo está en ti. Esta unidad con el universo te ayuda a comprender que todo lo que necesitas está en ti. Al reconocerte como creación divina con conexión infinita con el todo comprendes que no necesitas aprobación, no necesitas ser querido ni apoyado ni acompañado y que al único ser que necesitas es a ti mismo.
Para alcanzar este estado de paz, primero debes desaprender, despojarte de todo prejuicio inculcado desde la niñez, toda programación vacía y absurda  que para lo único que sirve es para sedar el YO y evitar que conozcamos y nos amemos como realmente somos: seres bellos y perfectos que no necesitamos mejorar nada.



VACIAR LA MENTE

"Vivir cada dia como si fuera el último, sin prisa, sin apatía, sin pretensión." Marco Aurelio. Todo lo que piensas y p...